El pueblo metodista unido ha tenido reacciones diversas ante sentencia de la Corte Suprema de los Estados Unidos, que establece al matrimonio civil, entre personas del mismo sexo, como un derecho constitucional.
En lo que coincide la mayoría en la Iglesia Metodista Unida (IMU) es que esta decisión, probablemente, profundizará que se viene dando en la iglesia desde hace mucho tiempo entorno a la homosexualidad y el marco legal de la iglesia que prohíbe al clero la bendición de matrimonios del mismo sexo y prohíbe a las iglesias de la celebración de este tipo de ceremonias.
La votación de 5 contra 4 en el caso de Obergefell contra Hodges, aborda dos preguntas: ¿permite la Constitución de Estados Unidos que los estados prohíban el matrimonio entre personas del mismo género y puéden estos negarse a reconocer los matrimonios de parejas homosexuales que se casaron en otro estado? Para ambas preguntas, la mayoría de la corte dijo que los estados deben reconocer el matrimonio entre personas del mismo sexo.
"La limitación del matrimonio a las parejas de distinto sexo siempre puede haber parecido natural y justo, pero su incompatibilidad con el significado central del derecho fundamental a contraer matrimonio que ahora se manifiesta," dijo en su escrito el juez Anthony Kennedy, representando a la mayoría.
La decisión combina cuatro casos presentados por 14 parejas y dos hombres cuyas parejas han fallecido. El anuncio se produjo en el aniversario de otras dos decisiones históricas: la del caso Lawrence contra el estado de Texas en 2003, que despenalizó el compartamiento homosexual y el caso de Windsor contra Estados Unidos, que estableció que parejas del mismo sexo que se hayan casado, deben recibir igual tratamiento bajo federal ley. La decisión no entrará en vigor de inmediato porque el tribunal da un plazo de tres semanas para quienes se hayan visto desfavorecidos por esta decisión, para que puedan apelar.
Algunos metodistas unidos esperan que estas acciones de la Corte Suprema, sean parte de la discusión cuando la Conferencia General, la máxima autoridad legislativa de la denominación, se reúna el próximo año en Portland, Oregón. "Creo que esta decisión tendrá apoyo de muchos y podrá a otros en la mitad del camino", dijo el Reverendo Sky McCracken, Superintendente del Distrito en el Oeste de Kentucky. Él será parte de la delegación de la Conferencia de Memphis a la Conferencia General." Sin duda va a ser difícil porque la gente va a tener que decidir entre lo que la ley terrenal establece y lo que dice la doctrina de la iglesia", agregó McCracken.
Sin embargo, el Reverendo Thomas Lambrecht cree que el fallo no tendrá mayor importancia entre los/as delegados/as a la Conferencia General. Lambrecht es vicepresidente y director general de "Buena Nueva", un grupo no oficial de la iglesia que apoya las enseñanzas que actualmente define la denominación sobre la homosexualidad. "La mayoría de los delegados que favorezcan el mantenimiento de la posición actual de la Iglesia sobre el matrimonio, lo hacen por convicción profunda y entienden que la iglesia en ocasiones tiene posiciones incompatible con los tiempo y la cultura en la que vive... Nuestro compromiso con la verdad bíblica no depende de la afirmación judicial por el Tribunal Supremo de este o de cualquier otra nación", argumentó Lambrecht.
McCracken, por su parte, añadió que hay algunas áreas en las que las enseñanzas de la iglesia y las leyes difieren. Señaló que tanto la pena de muerte y el aborto son legales pero los metodistas unidos están en desacuerdo. "El meollo en gran parte del debate sobre sexualidad en nuestra iglesia, es la diversidad interpretativa sobre la escritura que tiene el pueblo metodista unido, resaltó McCracken.
Para Angie Cox, una metodista unida en Ohio, el fallo significa que ella puede casarse legalmente a su pareja en su estado natal. "Esta es una pieza importante, no sólo en el reconocimiento de nuestros derechos humanos básicos, sino que también ofrece las protecciones legales y beneficios, que las parejas heterosexuales han disfrutado durante años.. para nosotras ella y su pareja- afirma legalmente un compromiso de 16 años a los ojos de nuestro estado", agregó Cox. Al igual que otros miembros de la iglesia, Cox espera que la Iglesia Metodista Unida continúe luchando, para mejorar la manera de ministrar a la comunidad homosexual.
Analistas en decisiones y procesos judiciales, con larga experiencia, consideran la decisión Obergefell como uno de las más significativas en la historia de la corte. Antes de la sentencia, 36 estados y el Distrito de Columbia reconocían legalmente el matrimonio entre personas del mismo género. A principios de este término judicial, el 6 de octubre, la Corte Suprema se negó a revisar las apelaciones de las sentencias judiciales que permiten el matrimonio entre personas del mismo sexo en cinco estados. Esta decisión extendió la aceptación del matrimonio civil del mismo sexo de 19 al 30 estados.
Decisión sin impacto inmediato en la iglesia
En la práctica, el fallo no toca enseñanzas o la práctica de la iglesia. El clero de cualquier tradición, aún tienen el derecho legal de rechazar la realización de una boda por cualquier razón, como lo hacen ahora. "La Primera Enmienda garantiza que las religiones, los que se adhieren a las doctrinas religiosas y otros, tienen la protección que necesitan para enseñar los principios que consideran centrales para su vida y para su fe", según señalaron los expertos.
Douglas Laycock, profesor de derecho y estudios religiosos en la Universidad de Virginia, dijo al Servicio Metodista Unido de Noticias que entre los defensores de los derechos de los homosexuales "se percibe un consenso en torno a que el claro no tienen que hacer las bodas... aunque sus demandas son crecientes, en la medida en que van logrando reivindicaciones, creo que esa concesión es probable que dure en el tiempo, considerado la autoridad de la ley en torno a la libertad religiosa", dijo Laycock.
La Rev. Susan Henry-Crowe, Ejecutiva de la Junta Metodista Unida de Iglesia y Sociedad (GBC&S), dijo que el fallo de la Corte Suprema sostiene tanto la libertad religiosa, como la igualdad de derechos de los ciudadanos ante la ley. Su agencia se encarga de promover la doctrina social de la denominación. Así mismo, señaló que "el Libro de Disciplina de la IMU, también reivindica los derechos humanos y las libertades de todas las personas, independientemente de su orientación sexual".
"La sociedad civil debe garantizar estas protecciones iguales para todas las personas ante la ley", dijo. "La Junta General de Iglesia y Sociedad afirma y mantiene en oración la obra de la Iglesia Metodista Unida, ya que seguimos en el discernimiento y la mejor comprensión del matrimonio. Como denominación con miembros en muchos países y culturas, estamos agradecidos por todas las naciones donde la libertad religiosa permite a todas las personas, que vivan su fe de acuerdo a su conciencia".
Parte del debate recurrente en iglesia
Debate sobre la postura de la iglesia ha salido a la superficie en cada Conferencia General desde 1972. Desde ese año, la iglesia ha declarado en su Libro de Disciplina, que todos los individuos son de valor sagrado, pero la práctica de la homosexualidad "es incompatible con la enseñanza cristiana". La Conferencia General, que se reúne cada cuatro años, ha votado consistentemente para mantener el lenguaje y con los años se ha expandido sobre las restricciones contra clérigos homosexuales y las uniones del mismo género. Oficiar uniones del mismo sexo es un delito imputable bajo la ley de la iglesia.
El Libro de Disciplina establece que el matrimonio es entre un hombre y una mujer. El clero declarado culpable en un tribunal de la iglesia, puede hacer frente a una pérdida de las credenciales o penas menores. El Libro de Disciplina también permite acoger denuncias contra pastores/as que oficien en las uniones del mismo género, para que puedan resolverse sin necesidad de un juicio. Esto es lo que ha sucedido con denuncias recientes.
Un día antes de la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos, grupos de clérigos/as y los laicos/as en Texas, publicaron -cada uno- una carta abierta a los/as obispos/as metodistas unidos/as de ese estado, pidiendoles evitar los juicios de la iglesia contra los clérigos oficiantes en las bodas entre personas del mismo sexo. La carta del laicado tiene más de 1.000 firmas y la del clero más de 150, incluyendo candidatos a la ordenación y seminaristas.
Mellany McDonald-Williams, líder laica activa en la Iglesia Metodista Unida de San Juan en el centro de Houston, ayudó a escribir una de las cartas. "La mera posibilidad de la igualdad de matrimonio en los Estados Unidos, era para mí una indicación de que ahora es el momento para que la iglesia se pronuncie por la igualdad en el cuidado pastoral a todas las personas, independientemente de su orientación sexual o identidad de género", dijo McDonald-Williams en un comunicado.
Muchas peticiones relativas al tema de la sexualidad humana, serán presentadas ante la Conferencia General de 2016. La Mesa Conexional, un cuerpo de liderazgo de la IMU, está elaborando una legislación que eliminaría el lenguaje prohibitivo de ley de la iglesia, contra las bodas igualitarias y la ordenación de clérigos/as homosexuales pacticantes. En contraste, los miembros de Good News y otros grupos, están proponiendo una legislación que impondría sanciones obligatorias para los que oficien bodas entre personas del mismo sexo. Por su parte, varias conferencias anuales están enviando peticiones a la Conferencia General, para que se aborden cuestiones relativas al tema de la sexualidad desde diversas perspectivas.
La Conferencia General de 2016 tendrá 864 delegados/as, de los cuales, el 42 por ciento provienen de otras regiones de la iglesia como: África, Europa y las Filipinas. Corresponderá a este órgano mundial, decidir qué dirá la ley de la iglesia en el futuro.
* Hahn es reportera de noticias multimedia para United Methodist News Service. Póngase en contacto con ella en (615) 742-5470 o [email protected].
** El Rev. Gustavo Vasquez es el Director de Comunicaciones Hispano/Latinas de la IMU. Puede contactarle al (615)742-5111 o por el [email protected].