Este 19 de abril de 2020 se conmemoró el 25 aniversario del ataque terrorista de la ciudad de Oklahoma, mientras el estado está bajo órdenes de cuarentena debido al COVID-19, siendo este el primer año en que las familias de las víctimas y sobrevivientes, no se reunirán en el sitio conmemorativo.
Monumento Memorial Nacional de Oklahoma City. Foto cortesía de la Conferência Anual Misionera Indígena de Oklahoma.
"Este aniversario es algo diferente, desalentador pues el sitio está cerrado y se han levantado barricadas para evitar la visita de las familias debido a la orden de permanecer en casa" dijo Anne Marshall, cuyo esposo, Raymond Johnson, se encontraba entre las 168 personas que murieron en el ataque terrorista del Edificio Federal Alfred P. Murrah en 1995 en la ciudad de Oklahoma.
La mayoría de las celebraciones se han trasladado a un formato en línea con estaciones de televisión locales que emiten cobertura especial, un golpe inesperado para Marshall. En la entrevista del Canal de Noticias 9 con un médico forense, transmitida el 17 de abril de 2020, una foto mostraba una pizarra con los nombres de los/as fallecidos/as y señalaba cómo se identificaban a las víctimas. Por primera vez, Marshall se dio cuenta de que los registros dentales se usaron para identificar a su esposo. “Fue una sensación extraña; estás viendo la cobertura y, de repente, ves el nombre. Muchos/as me enviaban mensajes de texto y me decían: ‘¿Viste eso? ¿Estás mirando?’ Fue impactante después de todos estos años conocer estos detalles" dijo Marshall.
Raymond Johnson, esposo de Anne Marshall, fue identificado entre las 168 personas que murieron en la explosión del edifício federal Alfred P. Murrah en 1995 en Oklahoma City. Foto cortesía de la Conferencia Anual Misionera Indígena de Oklahoma.
Durante los últimos 25 años, he tenido diferentes reacciones al aniversario; a veces me siento abrumada y otras veces encuentro una sensación de paz a través del apoyo de amigos/as y conexiones con otras familias que perdieron seres queridos en el atentado. He asistido a muchas de las reuniones conmemorativas. pero no a todas. "Con el paso del tiempo, hay una curación en el duelo colectivo que compartimos con otras familias" dijo Marshall.
Junto con el descubrimiento de cómo se identificó a su esposo, Marshall todavía tiene preguntas sin respuesta y pensamientos que inundan su memoria cada año. Al principio le escribió cuatro cartas a Timothy McVeigh, el terrorista condenado y cada carta fue devuelta sin abrir. Nunca sintió ningún tipo de remordimiento por parte de McVeigh, ni siquiera cuando presenció su ejecución el 11 de junio de 2001 en Terre Haute, Indiana.
Al momento del atentado, Marshall trabajaba en la ciudad de Nueva York como parte del personal de la Comisión de Unidad Cristiana y Asuntos Interreligiosos de La Iglesia Metodista Unida; tomó un vuelo de regreso a Oklahoma City el día del ataque terrorista y cuando llegó, los/as rescatistas le pidieron una descripción de lo que su esposo llevaba puesto ese día para trabajar. "No pude verlo esa mañana porque estaba en Nueva York"; no tenía idea y eso me ha quedado grabado. Me pregunto ¿qué llevaba puesto? No me devolvieron ninguna ropa; sólo me devolvieron su billetera, monedas que tenía en su bolsillo y una navaja; eso fue todo lo que recuperé" recordó.
Marshall se reunió con los rescatistas que recuperaron los restos de su esposo. Foto cortesía de la Conferencia Anual Misionera Indígena de Oklahoma.
Marshall se reunió con los/as rescatistas que recuperaron los restos de su esposo. En el verano de 1995, visitó al equipo en Sacramento y les dio regalos que representan su herencia de Muscogee Creek para honrar sus esfuerzos en el rescate de los restos de su esposo.
En última instancia, la amabilidad de amigos/as, familia y completos extraños/as le han ayudado a sanar a lo largo de los años. Marshall recordó que después de que la cerca perimetral y los escombros fueron retirados, por primera vez, ella fue al lugar del atentado donde fue recibida por un agente del FBI y compartió su historia. Encontró sillas plegables, y Marshall y un amigo se sentaron debajo de lo que se conoce como el "Árbol de los Supervivientes". "Pasamos toda la tarde sentados allí, hablando, riendo y llorando. Aprecié eso, probablemente más de lo que él se imagina, porque hizo más por mí que cualquier otra cosa" dijo.
"Árbol de los Supervivientes" frente al Edifício Federal Alfred P. Murrah en Oklahoma City. Foto cortesía de la Conferencia Anual Misionera Indígena de Oklahoma.
También mencionó que las numerosas llamadas y visitas de amigos/as y familiares la ayudaron a superar los tiempos realmente difíciles. Marshall tuvo la oportunidad de compartir su experiencia y mostrar la amabilidad que experimentó después de los ataques del 11 de septiembre en la ciudad de Nueva York. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos reunió a las viudas del atentado de Oklahoma City para reunirse con viudas del 11 de septiembre; encontraron apoyo al compartir sobre sus esposos y las dificultades de vivir sin ellos.
A lo largo del proceso de curación, dijo Marshall, ella ha redefinido quién es y se siente más valiente y más fuerte debido a la experiencia. “Después de este evento, tuve más coraje; me volví más audaz y mucho más franca porque sé que no podría pasar por algo peor de lo que ya he pasado. No fue un cierre, sino un proceso de crecimiento" concluyó.
Anne Marshall frente al Edifício Federal Alfred P. Murrah, centro del ataque terrorista de 1995. Marshall es miembro activa de la Iglesia Metodista Unida de Wewoka de la Conferencia Anual Misionera Indígena de Oklahoma. Ella es, también, delegada a la Conferencia General Metodista Unida de 2021. Foto cortesía de la Conferencia Anual Misionera Indígena de Oklahoma.
Marshall dijo que considera que se convirtió en una mejor persona dispuesta a actuar para otros/as y ser una voz para quienes son silenciados. Marshall es miembro activo de la Iglesia Metodista Unida Wewoka en la Conferencia Misionera Indígena de Oklahoma, y delegada a la Conferencia General Metodista Unida de 2021.
Hoy, Marshall sirve en el consejo tribal de Muskogee Creek mientras trabaja en una legislación para garantizar que todos los miembros tribales se cuenten en el Censo 2020 de los Estados Unidos. Ella también está creando una guardia de honor exclusivamente femenina para la tribu.
Los/as coordinadores/as del programa para conmemorar el 25to aniversario del ataque, esperan reunir a las familias en el otoño, cuando se levanten las órdenes de cuarentena.
* Este material fue producido por la Conferencia Misionera Indígena de Oklahoma. Para ver el articulo original en ingles, abra aquí.
** Leonor Yanez es traductora independiente. Puede escribirle a [email protected]. Para leer más noticias metodistas unidas, ideas e inspiración para el ministerio suscribirse gratis al UMCOMtigo.